Héroes Regionales, sin capa ni espadas.

Bombero Insigne de Chile.

Hugo Hernán Olivares Rodríguez, un hombre de 1.76 metros de altura, contextura delgada, cualquiera que lo ve no sabe que su edad cronológica es de un ser octogenario,  a punto de cumplir 86 años de vida, 70 de ellos, ligados de forma activa a Bomberos de Chile, a los 15 años ingreso a la institución de los Caballeros del Fuego, cuentan que desciende de Agapito Olivares Tapia, su padre uno de los fundadores del Cuerpo de Bomberos de Constitución, el hular de sirenas ante su deceso, replican hasta hoy en su corazón mancebo, a pesar de tener una operación este año, siendo el dolor más grande que alberga su alma.

La institución más querida por los ciudadanos, estos hombres y mujeres que son todos ellos    héroes anónimos de Chile, un servicio voluntario, donde aún se paga por servir y se sirve con abnegación, sin horas extras, ni sobre sueldos, sin tener paga, que incrementa el sacrificio voluntario en este punto del hemisferio del mundo, donde la vida rinden si ello fuese necesario.

Hugo Olivares, conoció a su cónyuge María González desde su adolescencia, ya que vivián en zonas residenciales  colindantes al barrio, entre Santa María y  Alameda, ella 14 y él 16 años, pero el dar el sí ante el altar fue solo  hasta cumplir ella 23 años y él 25, tras haberse titulado y ejercido luego de cinco años. De este enlace nacieron Yanet Alejandra y Hugo Andrés, con 69 años de vida marital, casi los mismo a años que lleva de bombero activo, donde confiesa que es una mujer en extinción, jamás le creó problema alguno, apoyando sus dos pasiones, el ser profesor y bombero voluntario, ya que jamás recibió un mal trato al traer a sus camaradas a su hogar, que era un punto de encuentro pues entendía que el servicio público era parte de sus vidas.

Tras su formación marista, Hugo, se tituló como profesor de estado, una pasión que llevó por 44 años, y a la cual aún sigue ligado, ya que es dirigente de los docentes jubilados en su calidad de presidente, siente mucho lo que viven actualmente el profesorado, ya no existe respeto, antes el profesor era una autoridad, hoy están expuestos a cualquier cosa, confesó, Olivares.

Sus grandes anécdotas y jocosas describió, “una vez fue tanto el llamado a servir, que de tan rápido que salió al hular de la sirena, en calle Freire, había un incendio colindante, atacando en el llamado de la emergencia salí corriendo nos conectamos a un grifo con atacando en dos frentes, sin darme cuenta que tras el ataque al llegar al combatir el incendio, en algún momento me sofoque con el humo, tras salir a la calle libre del humo un ciudadano alegaba que no llegaban los bomberos y el casi había muerto ahogado tras sofocarse con el humo de la emergencia, en otra oportunidad al llegar al cuartel, se percató que alguien que lo vio le manifestó mi honorario, lleva una prenda intima enredada en mi ropaje, efectivamente era asì, lo bueno es que la lencería esta limpiecita le conteste”.

Vida Bomberil

La familia Olivares Tapia de sus seis hijos todos sirvieron fielmente a la Instituciòn hasta nuestros días han querido ser parte del diario vivir de una forma de contemplar el servicio público, desde  Roberto Olivares, gran instructor de Cadetes, formando las primeras Brigadas Bomberiles en la comuna como en la Regiòn de Maule, hasta su hermano mayor también Bombero Insigne de Chile que con 93 años pertenece a la Cuarta Compañía de Bomberos de Talca, describe Hugo Hernán que solo quedan stres de los seis hermanos vivos que todos sirvieron a la institución bomberil.

Los Chicos Buenos

El Vice Superintendente Olivares, es claro en señalarle a las nuevas generaciones lo siguiente: “la vida de voluntariado requiere un gran compromiso de vida, perseverancia, honradez, compañerismo, lealtad, entre muchos otros valores que sus oficiales sabrán brindar, como una forma de vida,  que les hará ser un mejor ser humano, un ser servil a la comunidad, que escapen de todo flagelo que quiera atacarte, ser parte de una sociedad de voluntariado que te brinda valores y capacidad para enfrentar desafíos de la vida misma”, finalizó mi Vice Superintendente Hugo Olivares Rodríguez.