El concejal talquino Rodrigo Poblete Reyes revisa la caída, la autocrítica y el renacer del PS en el Maule
Tras años de retrocesos y desconexión territorial, el Partido Socialista vive un ciclo de reconstrucción en la Región del Maule. El concejal y abogado Rodrigo Poblete Reyes repasa en entrevista las luces, sombras y aprendizajes de este proceso, marcado por nuevas figuras, un electorado que vuelve a confiar y la convicción de que el socialismo maulino aún tiene mucho que decir.
Una conversación sobre memoria, tropiezos y futuro
Para Rodrigo Poblete Reyes, concejal de Talca y abogado, hablar hoy del socialismo en el Maule es volver a una historia que tuvo gloria, crisis y reconstrucción. En tono reflexivo, reconoce que el partido vivió una etapa dorada que parecía inamovible: un senador en cada mitad de la región, un diputado en la capital regional y hasta la alcaldía de Talca, un hito que pocos creían posible.
“El PS fue columna vertebral de la centroizquierda en el Maule. Teníamos presencia política, social y territorial. Éramos un actor real y transformador”, recuerda.
Pero aquel periodo, dice, también dejó lecciones duras. La derrota no llegó de golpe, sino a través de señales que no se supieron leer a tiempo.
“Hubo errores políticos, personales, desconexión con las bases, excesiva confianza. Y, sobre todo, faltó recambio ordenado. Eso nos llevó a un verdadero desierto electoral y político.”
El camino de retorno: luces en medio del desierto
En el análisis de Poblete, los últimos años muestran un patrón de lenta pero firme reconstrucción. Menciona tres hitos como señales concretas de ese renacer:
-
2017: Álvaro Elizalde logra casi 31 mil votos en un sistema de voto voluntario.
-
2023: Christian Suárez obtiene más de 56 mil votos en una de las peores elecciones para el progresismo.
-
2025: Paulina Vodanovic retiene y aumenta la votación neta socialista pese a campañas adversas y operaciones comunicacionales.
Para el concejal, no son hechos aislados, sino el resultado de un proceso deliberado:
“Es la reconstrucción paciente de una fuerza que estuvo arriba, cayó y decidió levantarse con más humildad y rigor.”
“La ciudadanía vuelve a confiar en nosotros”
El mensaje que, según Poblete, entregan las urnas es directo: existe un electorado socialista y progresista que sigue ahí, incluso en escenarios adversos.
“Ese mundo nos está diciendo que cree otra vez en un partido con historia, con principios sólidos y con capacidad de ofrecer seguridades frente a la delincuencia, la incertidumbre económica y la vida precaria.”
Pero también —advierte— el Chile actual exige oportunidades, crecimiento con igualdad y derechos sociales efectivos. En ese sentido, el Maule reclama un trato que lo saque de la idea de “región secundaria” o “patio trasero”.
El desafío del presente: conectar con nuevas audiencias
Poblete insiste en que el socialismo maulino no puede quedarse en la nostalgia ni en la autocomplacencia. La tarea —dice— es más profunda: sintonizar con la clase media, con el mundo popular, con los nuevos modos de vivir y aspirar.
“Las personas quieren bienestar, seguridad, movilidad social. Y esas demandas no siempre caben en la pura ideología. Si queremos ser opción de mayoría, debemos interpretar esas aspiraciones.”
Un partido que aprende, cae y se vuelve a levantar
La reconstrucción socialista en el Maule no está cerrada ni garantizada. Poblete lo sabe y lo asume como un proceso vivo, lleno de matices, desafíos y aprendizajes.
“Nos levantamos con más humildad. Y eso, quizás, es lo que más ha valorado la ciudadanía.”
Mientras el PS regional intenta consolidar este nuevo ciclo, su apuesta es clara: reivindicar su historia, reconocer sus errores y volver a ser un actor relevante en el territorio; uno que ofrezca certezas y futuro a una región que exige ser escuchada.




