Más de 50 personas, entre funcionarios de establecimientos educacionales, personal de salud y Carabineros, fueron recientemente certificados en Primera Ayuda Psicológica (PAP) por la Seremi de Salud del Maule. La capacitación busca fortalecer la primera respuesta emocional ante emergencias o desastres naturales, especialmente en las comunas costeras de la región, que han enfrentado situaciones complejas como incendios forestales y la reciente desaparición de siete pescadores del Bruma.
La iniciativa forma parte del Plan Regional de Formación de Respondedores/as impulsado por la Mesa de Salud Mental y Apoyo Psicosocial (Smaps), cuyo objetivo es preparar a funcionarios clave para contener, orientar y acompañar a la comunidad en momentos de alta tensión emocional.
La seremi de Salud, Carla Manosalva, destacó que esta formación permite a los participantes cuidar su propia salud mental, para luego convertirse en apoyo efectivo dentro de sus comunidades. “Este trabajo colaborativo entrega herramientas para el autocuidado y también para transmitir tranquilidad en escenarios de crisis, ya sea en entornos escolares, rurales o urbanos”, explicó.
Desde Carabineros, la general Maureen Espinoza valoró la alianza institucional que ha permitido capacitar a 128 funcionarios en la región. “El Maule enfrenta con frecuencia situaciones de emergencia. Saber brindar una primera contención emocional puede marcar una gran diferencia en cómo las personas enfrentan esos momentos. Este es un paso clave hacia una atención más cercana y humana”, señaló.
Uno de los certificados fue Claudio Díaz, encargado de convivencia escolar en la Escuela Superior Nueva Bilbao. “Fue una experiencia muy enriquecedora. Adquirir estas herramientas no solo sirve en casos extremos, también ayuda a mejorar el trato cotidiano con estudiantes, colegas y apoderados”, comentó.
La formación, desarrollada en conjunto con la Seremi de Educación, el Servicio de Salud del Maule y Carabineros de Chile, busca generar una red de apoyo emocional sólida y activa, capaz de responder con sensibilidad y conocimiento en contextos críticos. La meta es que estas acciones preventivas y formativas sigan replicándose en más comunas de la región.